miércoles, 6 de febrero de 2008

All You Need Is Love

El 10 y 11 de abril del año 1815, el volcán Tambora situado en Indonesia entró en erupción, siendo la erupción más violenta de la historia moderna, cubriendo las cenizas el sol durante dos días y trastocó el clima mundial, haciendo de 1816 el año sin verano. En esta situación, Mary Wollstonecraft Shelley y su marido Percy Bysshe Shelley, que no tendrían anda mejor que hacer, hicieron una visita a su amigo Lord Byron que entonces residía en Villa Diodati, Suiza. El amigo Byron tras leer una antología alemana de historias de fantasmas, Byron retó a los Shelley y a su médico personal John Polidori a componer, cada uno, una historia de terror. La leyenda dice que Mary Shelley concibió esa noche la idea de Frankenstein en un sueño, concibiendo la que se ha considerado la primera historia.

Ya hablé la semana pasada de la versión que James Whale hizo de esta novela, y ahora le toca el turno a su segunda parte: The Bride of Frankenstein dirigida de nuevo por Whale en 1935.

En la novela original (ya tardáis en leérosla), la criatura (que no el monstruo), le plantea a su creador el hecho de que le fabrique un alma gemela, una pareja:

“Si Alguien Fuera Capaz de Sentir Piedad Por Mi Desgraciada Existencia, Con Mayores Bondades Devolvería Yo El Favor”

Sin embargo, Victor Frankenstein aunque comenzado su trabajo se niega a finalizarlo (al contrario que pasó en la adaptación de Keneth Branagh 1996), viendo lo sucedido la Criatura le lanza la siguiente amenaza:

“Si tu me niegas mi noche de boda, prometo estar en la tuya”

Amenaza que cumple el tío...

Hablemos ahora del tema que nos ocupa, que cuando hablo de esta novela se me va el santo al cielo... La película comienza con los Shelley hablando con Lord Byron, quien halaga la virtud de Mary (interpretada por la bella Elsa Manchester), de haber conseguido crear la obra que es mi pasión. Mary les cuenta a su marido y a su amigo, que la historia no se terminó donde nos dejó la anterior película, y comienza el relato de su segunda parte.


La película por tanto comienza donde nos dejó su predecesora, en el molino ardiendo, y nos muestra que tanto Henry Frankenstein como su creación, han conseguido sobrevivir, aunque todo el pueblo dé por muerto a este último.

La criatura comienza de nuevo a vagar por el mundo buscando su sitio (al final me sentiré identificado) sin encontrarlo, encontrando sólo dolor y rechazo, hasta encontrar a un monje ciego en una cabaña, que le instruye en el bello arte de fumar y beber (y menos mal que es religioso el tío). Observamos que la criatura tiene la capacidad de hablar, aunque sea torpemente, pero algo es algo (Fumar bueno dice el tío), ya que en la primera parte el tipo solo emitía gruñidos....



Por otro lado, Henry convalece en su casa cuando recibe la visita de un antiguo profesor de filosofía suyo: El doctor Pretorius, que le habla de su admiración por el hecho de haber creado una criatura viva. Se lleva a su casa al enfermo y le enseña sus experimentos. Los experimentos son una serie de personas en miniatura, artificiales siendo la parte más rara y surrealista de la película...

El tipo insta a Henry a unirse a él para crear una nueva raza de seres, para crear una mujer, con un cerebro artificial que él mismo fabricaría. Henry se niega marchándose de la casa y dejando al doctor con un palmo de narices.

En este momento actúa la mano del destino, ya que a la cabaña del monje llegan un par de cazadores que reconocen al monstruo y éste en su lucha por escapar prende fuego a la casa. De nuevo huye, solo, en un mundo en el que no ha pedido nacer, hasta encontrarse con el Doctor Pretorius, quien pone en marcha el plan maestro: secuestrar a Elisabeth, prometida de Henry, y así obligarle a ayudarle en su creación... Henry, como no podía ser de otro modo, acepta.

De nuevo nos encontramos en el laboratorio del científico loco que nos mostraron en Frankenstein, y observamos el proceso de crear una vida: las cometas son lanzadas a la tormenta, captando la electricidad que recorrerá el cuerpo inerte sobre la camilla, dándole la vida.

De nuevo (lo siento, no pude evitarlo), los vellos de mi cuerpo hicieron la ola, al escuchar a Henry gritar: She’s Alive!!!!!! Para mí por supuesto el mejor momento de la película.
 


Las vendas son retiradas del rostro de la mujer y aparece la bella criatura. Esto es como los alienígenas del Universo Marvel, que las tíos son más feos que Picio, y las tías están pa mojar pan... El papel de la “novia” está interpretado por Elsa Manchester que repite en la película. La criatura baja al laboratorio, deseoso de ver a su pareja, quien grita de terror al verlo, dándose cuenta que ella también le teme y odia, por lo que decide destruir el laboratorio con todo lo que contiene, no sin antes dejar a Henry que hay con su amada... Increíble escena ésta, en que podemos observar en el rostro de la criatura está surcado por dos lágrimas...


Sinceramente me gustó más la primera, ya que la creación de la novia de Frankenstein apenas ocupa los últimos minutos de la película, y encima la banda sonora no me parece acorde con el tipo de película que tratamos, siendo un poco demasiado “romántica” por así decirlo para este tipo de películas, lo que hace que la atmósfera se pierda.

De nuevo nos muestran un ser incomprendido, que sólo quiere lo que queremos todos:, ser aceptado en un mundo que cada vez es más duro, simplemente amar y ser amado, lo más básico, que también le es negado.


1 comentario:

Anónimo dijo...

Te escribo después de no se cuantas veces ya, (espero que ésta sea la correcta) con mi nueva dirección, es que lo prometido es deuda...

Decirte que aunque no la he visto aún, me llamó la atención la escena de la niña que pusiste de la primera peli y que estoy esperando a que se descargue para tener mi propia opinión, (bueno si no me asusto antes...)

¿Sabrás quién soy?

Besitos